Dice Manuel que “los amantes hablan más”. No sé cuál es el concepto de amante, a qué personas debe aplicarse. ¿Es amante el que ama también sin saberlo? ¿Es amante el que ama en silencio, a la espera? ¿Es amante el que sabe que el amor tiene que ser recíproco y sabe que ese amor lo es, pero simplemente está lleno de miedos?
Los amantes hablan más. Hablan más a la vida. Se hablan más a sí mismos. Se autodirigen el discurso del amor, que es una forma de decir que habla por sí solo con miradas y caricias. Dice Manuel que los amantes hablan más. Y yo creo que los amantes respetan más el silencio. Los amantes hablan menos, pero dicen más. Lo dicen todo en dos palabras. Lo dicen todo en una línea, aunque se empeñen en expresarse en un entramado inagotable de frases que parecen bonitas pero que no significan nada. Los amantes lo dicen todo con su cuerpo que sonríe -tomo la expresión de Clara; acertadísima, preciosa-, con sus ojos que fingen la siesta o el llanto, con sus lecturas, con su caminar. Los amantes lo dicen todo. Pero hablan menos.
Los amantes hablan más. Hablan más a la vida. Se hablan más a sí mismos. Se autodirigen el discurso del amor, que es una forma de decir que habla por sí solo con miradas y caricias. Dice Manuel que los amantes hablan más. Y yo creo que los amantes respetan más el silencio. Los amantes hablan menos, pero dicen más. Lo dicen todo en dos palabras. Lo dicen todo en una línea, aunque se empeñen en expresarse en un entramado inagotable de frases que parecen bonitas pero que no significan nada. Los amantes lo dicen todo con su cuerpo que sonríe -tomo la expresión de Clara; acertadísima, preciosa-, con sus ojos que fingen la siesta o el llanto, con sus lecturas, con su caminar. Los amantes lo dicen todo. Pero hablan menos.
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