28 de febrero de 2009

Jornada de reflexión



Hoy ha sido la jornada de reflexión previa a las elecciones de mañana en las comunidades gallega y vasca.

Pero, ¿qué es reflexión? Lo mismo que reflejo. Uno reflexiona cuando ve que hay otros individuos que son como él o ella y que le devuelven un reflejo, sin necesidad de usar un espejo. A medida que los individuos desarrollan la capacidad de abstracción pueden reflexionar, es decir reflejarse, sin necesidad de otros seres como él, sino simplemente utilizando el pensamiento. Uno puede pensarse a sí mismo a través de lo que ha conocido fuera de sí mismo.

Hoy era día de reflexionar. Reflexionar si lo que uno ha visto fuera de sí mismo le ha gustado o no. Reflexionar sobre lo que uno quiere para sí mismo, para sus semejantes y para el entorno que le rodea y que rodea a sus semejantes. Reflexionar acerca de lo que hacer mañana. Porque mañana, como todos los días de elección, están en juego muchas cosas.

Ojalá las decisiones que se tomen mañana ante las urnas hayan sido fruto de una reflexión consciente y muy humana. Y ojalá que los resultados de las elecciones traigan, como poco, la PAZ.

La guerra

Francis Bacon. Ahora en el Museo del Prado.


La guerra [¿Qué guerra? - Todas las guerras] atravesó las vidas de muchas personas. De ella, cada individuo obtuvo una conclusión distinta. Hubo quienes se aislaron pensando en la desgracia de la condición humana. Y hubo quienes decidieron que el desastre se convertiría en elemento de la vida cotidiana para evitar así caer de nuevo en sus errores.

Hamburgo. Iglesia de San Nikolai. Monumento al ser humano. Bajo estas manos (y de las manos siempre la idea de ofrenda) el lema:

27 de febrero de 2009

Aprender (3)


Esta entrada es puramente improvisada. Tiene que ver, de nuevo, con aprender. Y
se la dedico, sobre todo, a Julia, aunque ella sea incapaz de entenderla ahora.
Estamos acostumbrados a entender el aprendizaje como un mero trasvase de conocimientos de un recipiente a otro. La mayoría de las veces en contextos de rígido academicismo y siempre haciendo intervenir la figura de un maestro o profesor o de un padre.

De lo que pocas veces nos damos cuenta es de la posibilidad de aprender por nosotros mismos, por medio de la reflexión y la búsqueda de soluciones a nuestros problemas. De ahí expresiones como "Aprendí mucho de aquello que me pasó y tendré más cuidado la próxima vez". Uno también aprende observando y hablando con otras personas (sin darse cuenta de que está aprendiendo con ello y disfrutando de esas acciones que realiza). Así aprender deja de ser una tarea que hay que hacer, para convertirse en una acción involuntaria de nuestro organismo, como puede ser respirar.

Cuando uno se da cuenta de eso y tiene en sus manos la posibilidad de enseñar algo, puede cambiar el método de enseñanza de modo que el aprendizaje que provoca sea un acto involuntario y no un deber o una obligación difícilmente cumplible.

De esto me he dado cuenta hoy, rodeada de profesores, aprendiendo la difícil profesión de la enseñanza y descubriendo que sólo a través de la experimentación y la vivencia real uno aprende: mirando cosas que a uno le interesan, traduciendo complejos mensajes con consomés y presas de carne de por medio, mostrando interés por los otros y bebiendo agua cuando el resto bebe vino o cerveza.

Aprender no es difícil. Aprender es estar en el mundo con los ojos lo suficientemente atentos y ser sensible a lo exterior. Cuando entendamos que es así de fácil, que a veces el conocimiento llega sin esfuerzo, entonces seremos capaces de transmitirlo así.

Ojalá me llegue pronto el momento de saber transmitir esto a los alumnos.

25 de febrero de 2009

Aprender (2)

Aprender.

Aprender es algo que me preocupa bastante. O más bien aprender a aprender (citando una de estas nuevas competencias que hay que aplicar por ley en el curriculum de enseñanza obligatoria). Me preocupa, también, aprender a enseñar. Y enseñar bien. Sobre todo me preocupa ahora que he abierto un poco las miras y he visto lo que se está haciendo en otros lugares.

Esta preocupación o interés me ha llevado a informarme un poco sobre la historia de la educación y los modelos y métodos alternativos.

En esa búsqueda de alternativas, me he encontrado con un documental corto sobre la Institución Libre de Enseñanza y las Misiones Pedagógicas. Es breve pero conciso, con los puntos básicos de la Institución y de su fundador y seguidores. Si estás interesado en Educación, quizás te guste.

24 de febrero de 2009

Do you speak English?



Esa fue la pregunta recurrente en Alemania. Porque yo no podía comunicarme allí más que en inglés. Y la mayoría de la gente sabía. Mejor o peor, pero sabían. Y quizás no fueran las conversaciones más fluidas que he mantenido en la vida, pero lo suficientemente claras como para comprar un billete de tren, explicar cómo es el sistema educativo español y el alemán o comprar un delicioso croissant con mantequilla.

Ellos, aquí, hacen la misma pregunta. Y se encuentran con la expresión sorprendida de quienes les escuchan y no saben qué decir porque no, no hablan inglés. Y algunos de ellos, dominando cuatro lenguas, son incapaces de comunicarse aquí. Porque no, lo nuestro no son las lenguas.

¿Cuándo aprenderemos la importancia de las lenguas en este país? Aunque no sé de qué me sorprendo, si incluso hablar las lenguas cooficiales está mal visto y es penalizable por algunos...

Estos días, más que nunca, me maravillo con Babel...

23 de febrero de 2009

"Estos días azules y este sol de la infancia"

Y el mar vuelve a aparecer. Con el ejército republicano en retirada, el 27 de enero de 1939, van unas sombras humanas. Aún dura la de aquella muchachita que se casó en 1873, pero ahora es una pobre mujer huyendo en una ambulancia. Los fugitivos quedan abandonados en la frontera, diluvia, los papeles del hijo se dejan en el vehículo. ("La madre de don Antonio, de ochenta y cinco años, con los cabellos mojados, era una belleza trágica"). Les dan pan blanco y queso. En un coche puede entrar el poeta enfermo; sobre sus rodillas se acomoda la madre. Los dos van hacia la morada de la eterna quietud; no sobre delfines, sino a través de funcionarios burocráticos. Cerbère, Colliure. Ya era el 28 de enero. Una sola vez salió el poeta de la pensión; viendo las barcas de pescadores, dice a su hermano Pepe: ¡Si pudiera vivir detrás de una de estas ventanas, libre de todas preocupaciones!. El 19 de febrero empeoró y moría el día 22 por la tarde. Los símbolos vuelven: era un miércoles de ceniza, frente quedaba el mar. La madre, tierra, mar, soledad desde 1893, ya no hacía falta para más desamparos; era la lamparilla que se extinguía cuando falta el aceite. Tres días después, el 25 de febrero, iba en busca del hueco recién abierto para el hijo. Entre aquel jubiloso salto de delfines y este mar gris de febrero había vivido un grandísimo poeta. Eran unos años -¿muchos, pocos?- en los que el tiempo no se detuvo, pero que ahora, al contemplar una obra sin límites, se nos antojan muchísimos, o muy pocos para lo que quisiéramos tener. El último verso del poeta, solo, aislado, reza simplemente: "Estos días azules y este sol de la infancia". Volvía el tiempo, el gran tema de Machado, pero buscando premoniciones en sus versos -¿cuántas veces se recordó el Autorretrato?-, la tarde del 22 de febrero había sido entrevista y, fatal, se había cumplido.

(Y encontrarás una mañana pura
amarrada tu barca a otra ribera, XXI)


Texto escrito por Manuel Alvar en ANTONIO MACHADO. Poesías Completas. Ed. Espasa. Colección Austral. Ed. 2001.



Me habría gustado escribir algo a mí. Recordar la figura de Antonio Machado desde la distancia de estos 70 años que separan aquella tarde de la tarde de ayer. Sin embargo, he leído tantas veces estas líneas de Manuel Alvar y me gustan tanto, que simplemente las comparto hoy contigo. Volviendo a amar la poesía.

20 de febrero de 2009

Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar

Hace unos días, una profesora alemana de español me dijo cuáles eran los libros en español que leía con sus alumnos. Me recomendó algunos que yo no había leído y los olvidé cinco minutos después. Varios días más tarde, en Hamburgo, paseando por una librería interesante con postales de Käte Kollwitz, vi un título que me recordó a aquéllos que me había recomendado. Estaba en español con anotaciones en alemán. Bien, pensé, así podré aprender algunas palabras en alemán. Lo compré. Y no empecé a leerlo hasta ayer.

Luis Sepúlveda escribió este fantástico relato para sus tres hijos Sebastián, Max y León. Un día, hablando con Yolanda sobre literatura infantil, ella me dijo que no estaba muy interesada en este tipo de género. Le di la razón en algunos aspectos, pero no en otros, porque creo que hay muy buena literatura infantil: la que va dirigida a toda la humanidad. Las fábulas son el mejor ejemplo de literatura infantil, y también el mejor ejemplo de literatura universal. Esta Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar, es la fábula más bella que he leído en años. Creada para convertir en héroe a un gato agonizante, narra la importancia de la amistad, el apego a la tierra donde uno nace o vive, la necesidad de encontrar el lugar propio de cada uno y también la posibilidad de sentirse un igual entre diferentes. Habla sobre la vida, sobre la muerte, sobre la imaginación, sobre las relaciones entre humanos y animales, sobre el respeto y la tolerancia. Habla sobre el mar, la tierra, el cielo y la poesía. ¡Habla de tantas cosas en tan pocas páginas!

Leer es encontrarse, y yo me he encontrado en las páginas de este libro finito y desapercibido. Leer es entrar en contacto con el mundo y sentirse más libre. Yo, estos días en Hamburgo, me he sentido en contacto con el universo entero leyendo estas páginas. He pensado en generaciones de niños leyendo este relato maravilloso y he sonreído imaginando el bien que les haría.

Intuyo, lector, que ahora estarás interesado en leerlo. Te recomiendo Hamburgo para hacerlo, o cualquier asiento cómodo desde el que dibujar mentalmente el puerto, San Miguel y todas las gaviotas que, sin darse cuenta, te narran su historia y la de Afortunada.

Ahora dos citas para ir abriendo el apetito de lectura:

“En tu vida tendrás muchos motivos para ser feliz, uno de ellos se llama agua, otro se llama viento, otro se llama sol y siempre llega como una recompensa luego de la lluvia. Siente la lluvia. Abre las alas”.

“El humano acarició el lomo del gato.

- Bueno, gato, lo hemos conseguido –dijo suspirando.
- Sí, al borde del vacío comprendió lo más importante –maulló Zorbas.
- ¿Ah, sí? ¿Y qué es lo que comprendió? –preguntó el humano.
-Que sólo vuela el que se atreve a hacerlo –maulló Zorbas.”

[Es el mejor final para una historia como esta. Es el mejor final para este viaje].

Münsterdorf, 19 de febrero de 2009.

16 de febrero de 2009

Maskenzauber, 2009

Hamburgo, 15 de febrero de 2009.



Pasearse por las calles de Hamburgo es un placer cualquier día. Ayer, sin embargo, el frío no nos dejaba apenas respirar. Siempre dentro de algún sitio, para evitar los pies de hielo y la nariz de Rudolf. Aun así, una escucha el Canon de Pachelbel en plena plaza del Ayuntamiento, y por puro disfrute sensorial se acerca más hasta el centro de la música. Y del centro de la música surge un maravilloso plantel de actores disfrazados con trajes fantásticos, bailando y sonriendo, a pesar de los pies de hielo y la nariz de Rudolf. La música nos invitó a bailar, y el frío se nos olvidó por un momento.

[la foto está tomada de Flickr, porque las que hice yo no salieron tan bien]

Nieve.


Un camino nevado, como este que nos separa.

15 de febrero de 2009

Vuelve la poesía.

He conocido a un holandés encantador en Hamburgo. Como resultado de largos cafés y cenas españolas, ha salido este poema extraño en neerlandés:

Ik heb de minnaars gezien
zy hadden elkaar lief in de trein
zy waren tezamen en zy waren iedereen
de gehele liefhebbende mensheid
is in hen opgesomd.
De vochtige lippen raakten,
de ogen moe van het kijken naar
de ogen
en die halfzachte glimlach
als ze scheiden.
Ik heb ze gezien en dus heb
ik ze allemaal gezien
en de minnaars die elkander lief hadden
in de korte reis
van jouw deur naar mijn deur.
De oneindigheid in haar handen
en het licht in de omhelzing.

El poema original, del que salió este producto de la interculturalidad, estaba escrito en español y sufrió una fase intermedia de traducción al inglés. La fase intermedia quedó en el aire. El original, este:

He visto a los amantes
amándose en el tren.
Eran dos y eran todos.
La humanidad amante entera
se resume en ellos:
los labios húmedos pegados,
los ojos cansados de mirar
los ojos.
Y esa sonrisa vaga y boba
al separarse.
Los he visto a ellos
y ya he visto a todos.
Los amantes que se aman
en el breve trayecto que hay
entre tu puerta y mi puerta:
el infinito en sus manos,
y la luz en el abrazo.

14 de febrero de 2009

Estar fuera, estar dentro

Es una sensación inexplicable con palabras. Como la mayoría de las sensaciones. Uno se siente parte de algo o no. Se siente fuera o dentro. Lo extraño es que en los últimos días, paradójicamente, me he sentido fuera como si estuviera dentro, y dentro como si estuviera fuera.

No quiero complicarte la lectura de esta entrada. Porque simplemente es una reflexión de última hora, después de haber pasado el viernes y hoy entre Kiel y Husom, con toda la gente del programa de intercambio, hablando en más de cinco lenguas diferentes, o al menos intentándolo. Han sido dos días fantásticos en los que he descubierto la maravillosa conciencia ecológica de los alemanes, su pasión por las cosas bien hechas, el orden y también la importancia que para algunos tiene sentirse europeos. Sentirse dentro. Estar con todos.

Hasta ahora, aunque me sabía dentro de Europa, nunca tuve ese sentimiento intenso de pertenencia a una comunidad mayor que la de mi propia familia y amigos, quizá mi barrio, e incluso a veces mi país. Estos días me he dado cuenta de la importancia de formar parte de una nación de naciones. De lo bonito de sentirse dentro entre gente tan diferente. Porque los corazones, al fin y al cabo, buscan llenarse de lo mismo.

Me he enamorado en Alemania. De muchas cosas. De mucha gente. De mi gente de casa, por estar lejos, y de la gente de aquí por estar lejos. Uno, fuera, echa de menos algunas cosas, pero también aprende a hacer su hogar en todas partes.

12 de febrero de 2009

Canciones. 10

Sinéad O'Connor, She moved through the fair de la banda sonora de Michael Collins, una película impresionante con la que aprender la historia reciente de un país increíble como Irlanda, a través de la historia de uno de los personajes más importantes en la lucha por la independencia de Irlanda: Michael Collins.

La canción es preciosa. La historia, lamentablemente, triste. Por los que cayeron en la lucha, por los que optaron por la violencia y mantuvieron esa posición durante tanto tiempo, sin darse cuenta de la injusticia que eso suponía para sus compatriotas, para los seres humanos.

No sé quién es el autor de la letra de esta hermosa canción. La versión de Sinéad O'Connor es, sin duda, de las mejores que puedes escuchar.

11 de febrero de 2009

10 de febrero de 2009

Mi música para viajar /11

11. Glenn Miller

In the mood es lo más alegre que se puede escuchar. Deja poco espacio a la evasión y a la reflexión. Pero regala momentos maravillosos de baile.

9 de febrero de 2009

¿Hay vida después de la poesía?

Se me ha ocurrido pensar en eso hoy, recordando que hace muchos días que no leo un poema. Y sin duda sí que hay vida después de la poesía. Porque hay poesía en todas partes. En este aire frío con gotas de hielo hay poesía. En los ojos azules de cada alemán y de cada alemana con los que me cruzo por la calle. Hay poesía en la solidaridad con que te acogen y te preguntan si estás bien, si necesitas algo, si eres feliz en su país. Hay poesía cuando, después de una semana, sientes ganas de llorar al despedirte de una persona con la que has compartido tan poco y en realidad tanto. Hay poesía cuando existe el idioma común de las miradas y uno se olvida de cómo hay que conjugar ese condicional tan difícil que combina varios tiempos verbales. Hay poesía cuando de noche recibes un mensaje de España deseándote lo mejor. Hay poesía en tus ojos de lector que hoy lees esto e intentas imaginar alguna de las cosas que hoy te cuento aquí.

Hay poesía después de la vida.

Mi música para viajar /10

10. Ennio Morricone



Los oboes han hecho muchos viajes conmigo. Este oboe es inexcusable.

8 de febrero de 2009

Mi música para viajar /9

9. Noa

WE!!



Música para escuchar. Música de la que aprender.

7 de febrero de 2009

Mi música para viajar /8

8. Celtas Cortos



Si me descuido subo el último disco entero aquí. Es que realmente merece la pena.

5 de febrero de 2009

Hamburgo. Carlos Núñez.



Ayer me llevaron a ver Hamburgo. Una ciudad preciosa, sin duda. Las dos próximas semanas viviré allí, así que tendré tiempo de conocerla mejor, de sentirla un poco mía.

Hamburgo, a partir de ahora, estará ligada a Carlos Núñez. Porque ayer tocaba Carlos Núñez en un local que se llama Fabrik en Hamburgo, y no dudé en pedir que me llevaran. Fue extraño estar allí, rodeada de alemanes (a algún español oí también, claro) y escuchándolo a él hablar en inglés. Fue un sentimiento nunca antes vivido tan intensamente de pertenencia a una tierra, de sentirme fuera de casa, pero cerca por un momento. Quizás porque estaba sola. Porque no había amigos con los que bailar y con los que pensar que esto solo es una aventura de unos días. Me vi a mí misma ahí, escuchando tocar melodías hermosas en flautas mágicas, escuchando cantos tradicionales gallegos que me desgarraron el alma por un momento. Y los ojos llenos de agua que soltar. Y ni una lágrima en este país de personas duras y fuertes, aunque mis ojos lo necesitaran. La última, la mejor recompensa fue el abrazo de Carlos. Un abrazo universal, sí; pero absolutamente español. Con sonrisa, con buenos deseos.

Mi primer día en Hamburgo y el abrazo de Carlos Núñez. ¿Qué más se le podía pedir al día de ayer?
Ayer necesitaba que tiraran un poco de mí. Y An Dro tiró de mí, desde un dedo meñique.

Mi música para viajar /6

6. Luar na Lubre

4 de febrero de 2009

Primeras impresiones

Revisión rápida de mis primeras impresiones en Alemania:

1. El alemán es una lengua mucho más dulce de lo que pensamos. Puedo quedarme embobada intentando descifrar qué dicen, cazando al vuelo alguna palabra que me trae recuerdos del inglés, del francés o del latín.

2. La vida aquí (al menos en Itzehoe, donde estoy viviendo ahora) no es tan cara como pensamos. La leche, por ejemplo, es más barata aquí que en España.

3. Hace frío, sí. ¡Pero no tanto!

4. Es cierto que los alemanes se muestran distantes. Es difícil demostrarles tu cariño porque les resulta extraño que les abracen o toquen unos desconocidos.

5. Como era de esperar, el sistema educativo está algo mejor que en España. ¡Y menudas salas de profesores! Espero ir poniendo fotos.

6. El espíritu de Kant flota en el aire...

Mi música para viajar /5

5. Danny Elfman

Piano solo:


Piano duet:

3 de febrero de 2009

I just believe in me

(Para Marina.)

I just believe in me. Puede sonar egocéntrico y pretencioso, pero es cierto que uno, a veces, sólo cree en sí mismo.

El domingo estuve viendo los reportajes de Informe Semanal, el programa más antiguo de toda la televisión española. Y no pierde su fuerza y su calidad por muchos años que pasen.

Uno de los reportajes trataba sobre las polémicas causadas por los autobuses ateos y los autobuses religiosos de Madrid, Barcelona y Málaga. Este tema ha sido tratado ya en varias ocasiones por mi amigo Manuel Casal y en una entrada hermosa de Juan Cruz. Aunque estoy segura de que habrá habido muchos más. Al margen de la actualidad de esta noticia, al margen de la fe o la incredulidad, al margen de la controversia, al margen del enfrentamiento, yo me quedé con las palabras del sacerdote vallecano Javier Baeza, que me quitaron la venda por su lucidez, su realismo, su humanidad y su cariño.

Hemos experimentado que Dios no necesita grandes anuncios en los autobuses, sino que Dios habita en estos infiernos, no para bendecirlos, sino precisamente para que quienes no los habitamos vengamos a intentar rescatar a esta gente. Aquí la polémica de “si Dios nos hace felices o no nos hace felices” no pinta nada; con lo cual ni aquí pinta nada una proclamación de la no-fe, ni tampoco pinta nada una fe en un Dios que no se mancha los zapatos. Hemos experimentado y experimentamos, que el Dios de Jesús en quien creemos, que no es otra cosa más que la fe en el Ser Humano, con lo cual también compartimos mucha realidad con muchas personas ateas, es la fe en el Ser Humano enfangado para que deje de estar enfangado.


Te recomiendo que veas este reportaje. No te va a dejar indiferente.

Mi música para viajar /4

4. Kroke

2 de febrero de 2009

Mi música para viajar /3

3. Anathema

LUZ



Faro que alumbras al mundo
alumbra mi vida



[Faro de Kiel. Foto tomada en Panoramio]

Empieza el viaje.

1 de febrero de 2009

¿Qué pasa con los vídeos?

Echando un vistazo al blog, veo que no se pueden ver los vídeos que he colgado.
¿Tú puedes verlos? En caso de que no los veas, y si sabes cómo arreglarlo, dímelo, por favor.

Mi música para viajar /2

2. Ludovico Enaudi [Homenaje a Miwe]