21 de noviembre de 2008

Café y dulce de leche.

Sería simplista reducir a este sintagma mi día.
Pero en gran medida, mi día podría resumirse en eso: en la calidez y la sensación tan agradable que el dulce de leche deja cuando lo tomas, sobre todo si es helado; y en la energía que regala una buena taza de café.
También podría resumir mi día de hoy diciendo "las ganas de té americano y 'La buena vida'". Eso sobre todo: la buena vida. Esa que consiste en compartir, en cocinar con un amigo, en reír y confiar, en fotografiar balcones llenos de pimientos para la serie "Paseando por la vida", de Manolo, y no tener luego la imagen. Esa buena vida en la que te expresas sin palabras, en la que dejas pendiente una sesión de cine o cortometrajes tan interesantes como La ruta natural (palíndromo esencial en la vida de todo filólogo) y te alegras de tener amigas abulenses a través de las cuales conocer a egipcios encantadores.

¡Qué buen día hoy!

1 comentario:

Iorgeus dijo...

La ira de Amon-Rá y de Ramón caerá sobre vosotros! Oh pobres infelices que me llamais egipcio. La maldicion esta echada!
pdt: La foto de "me importa un pimiento que me llames egipcio" luego te la paso al mail, que ahora tengo la camara en madrid y yo toy en avilacity :)
Bzts!