Existen más frases que yo considero que no tienen sentido y que todo el mundo se empeña en repetir constantemente. Yo, cuando estoy delante de alguien que las pronuncia, lo que hago es tragar saliva; no sé por qué lo hago exactamente, pero sé que me funciona. Me tranquiliza. Dejo de pensar por un momento en la conversación, en mi interlocutor, en mí misma... me evado del mundo por unos segundos que para mí parecen horas.
La frase que voy a decir hoy la emplea muchísima gente, es una especie de coletilla que se utiliza a la hora de comparar cosas. Cuando alguien habla de lo mal que va la política, la utiliza; cuando habla de cómo se prepara un guiso, la utiliza; cuando habla del esfuerzo que tuvo que hacer para conseguir aprobar el último examen, también. A mí al principio me hacía gracia escucharla, ahora cuando sé que alguien la va a pronunciar, procuro adelantarme y cambiar el destino de sus palabras.
¿Quieren saber ya cual es la dichosa frase? Ahí va: Eso es como todo.
Y yo me pregunto: ¿¡¡Qué demonios es todo!!?
1 comentario:
Pues yo creo que 'todo' es un invento de gente débil, de neuronas bastas y de poca finura, cuyo significado es aproximadamente el mismo que el de 'nada'.
Lo que a mí me llama la atención es lo que puede llevar a alguien a decir eso. ¿Qué radiografía mental se puede imaginar de uno que dice que algo es como todo?
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